jueves, 12 de junio de 2008

Historias de la puta crisis

Ayer por la noche el paisaje de mi bar de cabecera estaba atiborradamente asolado por la crisis.
En la barra la clientela acaparaba copas a un ritmo desenfrenado intentando evitar que sus hígados quedasen desbastecidos.
Una divorciada al borde de la menopausia intentaba llevarse a su casa todas las existencias de testosterona que encontraba a su alcance antes de que la soledad colapsase los accesos a su tálamo vacío.
Un solitario consumía recuerdos de forma vertiginosa pretendiendo evitar realidades antes de que el precio de la memoria se pusiese por las nubes.
Un grupo de energúmenos despilfarraba patriotismo futbolero para llenar las estanterías vacías de su cerebro.
Una pareja se aburría mutuamente en un desesperado intento de desbloquear la autovía de su matrimonio.
Un pakistaní sonreía impertérrito ofreciendo rosas inodoras recién llegadas de algún invernadero cultivado por neoesclavos africanos.
Cuando volvía a casa un indigente dormía placidamente en su cajero.

viernes, 6 de junio de 2008

Un país de linchadores

Brama la muchedumbre. Vociferan, insultan y amenazan ante la casa de un pederasta, ante la sede de un partido político, ante el palco de la directiva de un club de fútbol. Queman campamentos de gitanos, golpean los coches de los deportistas, apedrean a sus rivales políticos. Anda la jauría suelta en los telediarios. Se sentencia sin juicio. Se condena de oídas. No importa el motivo, solo importa que el castigo sea ejemplar. Gritan pidiendo justicia pero sólo buscan venganza.